FOTOS Y TEXTOS : Daniel Antonio VIRUÉ
Primera estación del ramal a Ayacucho--considerando el inicio del mismo en el empalme de Chás y no en dicha estación perteneciente a la vía Ranchos--, Ibañez es un paraje rural . El edificio principal se encuentra sobre la izquierda de la vía principal --en el sentido de avance de la progresiva--y está bien mantenido. Las características constructivas son propias de la época de expansión del Sud (1911) y difieren notablemente de Chás que correponde a la 1ª etapa (1870). Más emparentado con el estilo de las estaciones del F.C.B.A.P. aunque de mayores dimensiones que las que esta empresa construía en zonas rurales.
Vista desde la playa de maniobras y en sentido descendente.
La construcción de este ramal se inscribe en la etapa que el F.C.SUD iniciara con el siglo XX. Establecidas sus lineas troncales y asegurado su territorio, la empresa solicitó la autorización para numerosos ramales que le permitirían canalizar mejor las cargas procedentes de zonas servidas por lineas troncales pero un tanto alejadas de las mismas en épocas de malos o inexistentes caminos.
Una Ley del 3 de julio de 1907 autorizaba con modificaciones varios de los ramales solicitados que verían la luz a partir de 1910. El ramal Chás-Ayacucho era de los que atravezaban zonas intermedias ya consolidadas multiplicando la conexión entre ellas y sirviendo a cargas específicas en lugares de acceso complicado. El SUD lo construyó en corto tiempo siguiendo su habitual política de ramales que enlazaban vías troncales y no quedaban en puntas de rieles muertas. Con esto aseguraba el tráfico propio del ramal más el derivado de las otras lineas por interconexión.
Si bien el panorama hoy no es exactamente igual ya que numerosos cultivos han modificado el paisaje, todo el ramal fue construído sobre campos de aptitud esencialmente ganadera. La parte meridional de la cuenca del Salado, con sus extensas explotaciones y su baja densidad de población, circunscribió la carga ferroviaria al ganado en pié destinado a los frigoríficos y en menor medida carga cerealera. La pérdida de este mercado por parte del ferrocarril--una de las primeras a manos del camión--condenó al ramal al penoso proceso de abandono, cierre y finalmente levantamiento. Sólo pudimos observar rieles en algunos pasos a nivel en las inmediaciones de las estaciones.
Nomenclador en el extremo descendente.
Nomenclador lado ascendente y vivienda.
Galpón de cargas en medio de la solitaria playa. Más atrás se distingue otro similar. Don Pedro de Ibañez y Anchorena, antiguo propietario de campos dió el nombre a la estación que fuera habilitada como de 2ª, para pasajeros, carga, encomiendas y hacienda . Con Telégrafo. Sección Chás-Altamirano.
Vista icónica del un paisaje ferroviario rural. Aún con décadas sin tráfico ni vías, la poderosa infraestructura ferroviaria sigue siendo, con su permanencia en el espacio, una invitación al recuerdo y a la nostalgia. No hay otro transporte terrestre inventado por el hombre que produzca el mismo efecto.
Brete y corral.
Primera estación del ramal a Ayacucho--considerando el inicio del mismo en el empalme de Chás y no en dicha estación perteneciente a la vía Ranchos--, Ibañez es un paraje rural . El edificio principal se encuentra sobre la izquierda de la vía principal --en el sentido de avance de la progresiva--y está bien mantenido. Las características constructivas son propias de la época de expansión del Sud (1911) y difieren notablemente de Chás que correponde a la 1ª etapa (1870). Más emparentado con el estilo de las estaciones del F.C.B.A.P. aunque de mayores dimensiones que las que esta empresa construía en zonas rurales.
Vista desde la playa de maniobras y en sentido descendente.
La construcción de este ramal se inscribe en la etapa que el F.C.SUD iniciara con el siglo XX. Establecidas sus lineas troncales y asegurado su territorio, la empresa solicitó la autorización para numerosos ramales que le permitirían canalizar mejor las cargas procedentes de zonas servidas por lineas troncales pero un tanto alejadas de las mismas en épocas de malos o inexistentes caminos.
Una Ley del 3 de julio de 1907 autorizaba con modificaciones varios de los ramales solicitados que verían la luz a partir de 1910. El ramal Chás-Ayacucho era de los que atravezaban zonas intermedias ya consolidadas multiplicando la conexión entre ellas y sirviendo a cargas específicas en lugares de acceso complicado. El SUD lo construyó en corto tiempo siguiendo su habitual política de ramales que enlazaban vías troncales y no quedaban en puntas de rieles muertas. Con esto aseguraba el tráfico propio del ramal más el derivado de las otras lineas por interconexión.
Si bien el panorama hoy no es exactamente igual ya que numerosos cultivos han modificado el paisaje, todo el ramal fue construído sobre campos de aptitud esencialmente ganadera. La parte meridional de la cuenca del Salado, con sus extensas explotaciones y su baja densidad de población, circunscribió la carga ferroviaria al ganado en pié destinado a los frigoríficos y en menor medida carga cerealera. La pérdida de este mercado por parte del ferrocarril--una de las primeras a manos del camión--condenó al ramal al penoso proceso de abandono, cierre y finalmente levantamiento. Sólo pudimos observar rieles en algunos pasos a nivel en las inmediaciones de las estaciones.
Nomenclador en el extremo descendente.
Nomenclador lado ascendente y vivienda.
Galpón de cargas en medio de la solitaria playa. Más atrás se distingue otro similar. Don Pedro de Ibañez y Anchorena, antiguo propietario de campos dió el nombre a la estación que fuera habilitada como de 2ª, para pasajeros, carga, encomiendas y hacienda . Con Telégrafo. Sección Chás-Altamirano.
Vista icónica del un paisaje ferroviario rural. Aún con décadas sin tráfico ni vías, la poderosa infraestructura ferroviaria sigue siendo, con su permanencia en el espacio, una invitación al recuerdo y a la nostalgia. No hay otro transporte terrestre inventado por el hombre que produzca el mismo efecto.
Brete y corral.
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